miércoles, 15 de diciembre de 2010

Tao te King

“Quien es como el Tao es perdurable.
Aunque su vida se extinga, no perece.”
Tao te King, Lao Tse

¡Que intrincadas ideas para un pensador occidental!
Lo anoté meses atrás con la esperanza de comprender y aunque no haya cobrado sentido alguno con el paso del tiempo, no me cabe la menor duda de que resulta hermoso y esperanzador. Me alivia y consuela y además me complace y agrada en su simplicidad y concisión.
Es el Tao te King, una obra que siempre reaparece en mi vida de un modo recurrente y con la que he disfrutado tantas veces como la he hojeado. En el último año siempre va conmigo, la abro, al azar, en cualquier momento o circunstancia y siempre doy con el pasaje y la interpretación de mi agrado. También lo hago con la Biblia, pero esto es capítulo aparte.
El universo no tiene sentimientos, dice en otro pasaje.
Los sentimientos son fruto de la debilidad, digo yo ahora, la fuerza brota del hombre recto y en armonía consigo mismo y con el universo. La fortaleza hace el tránsito más fácil y fluido, más sencillo y sugerente.
Entregarse a la debilidad es sentenciar tu destino y no en un sentido positivo ni favorable.

"Ah, la felicidad busca la luz, por eso juzgamos que el mundo es alegre; pero el dolor se esconde en la soledad, por eso juzgamos que el dolor no existe"
Bartleby, el escribiente; Herman Melville

¿Duele verdad?
- Claro que duele, duele con el dolor más atroz y pertinaz imaginable.

Me estaba preguntando como ilustraría esta entrada y tras recurrir a la red de redes he hallado esto que le encantaba a mi hijo.



Lao Tse