Un buen amigo me escribió en los días previos a la celebración del Concurso, por alguna razón que no viene al caso. A título de postdata, añadía el párrafo que a continuación transcribo. El firmante me ha dado permiso para publicar nuestro cruce de emails, no así para desvelar la identidad de la persona a la que se refieren los hechos y que le es especialmente querida. No me extenderé en explicaciones, el texto es por si mismo clarificador y significativo.
Postdata:
PS: ayer pasó una cosa que quiero comentarte, …………… tuvo un gravísimo accidente de tráfico del que inexplicablemente salió ileso/a, el coche está siniestro total tras siete vueltas de campana. Justo cuando él/ella tenía el accidente yo estaba viendo vuestro maravilloso blog sobre Jaime. Estoy convencido de que vuestro ángel tuvo mucho que ver en que él/ella salvara la vida tan milagrosamente.
Un abrazo.
Mi respuesta:
Amigo José: como te resultará fácilmente comprensible, a lo largo de estos dos años últimos he oído, escuchado, leído, soñado con toda suerte de frases, palabras y gestos, que de un modo u otro trataban de consolar, ayudar, confortar, aliviar, etc, etc…
Tu particular escrito, con carácter de posdata, me ha sumido en la perplejidad. Perplejidad que ha dado paso de inmediato a una forma de complacencia, que me ha inducido acto seguido a un estado de dicha que raramente disfruto desde hace tiempo. Este hecho innegable, porque solo a mí concierne, ya es, como podrás comprender, algo que me hace estar profundamente agradecido. Cuanto más, saber de ti que mientras te demorabas en nuestro blog, llegas a conclusiones de ese orden, con un calado emocional que bien se puede parecer al estado que para mí es habitual y cotidiano.
Concluir, pues, que tu nota ha sido acertada, oportuna y emotiva como pocas de las que he recibido.
“Que, los ángeles tienen potencia no lo pueden comprender los que nada saben del mundo espiritual y de su influjo en el mundo natural.”
Emanuel Swedenborg
Este señor dice las cosas con tal convencimiento que tal parece que las conociera de primera mano, lo releo con frecuencia a propósito casi siempre de los ángeles y sus cosas.
Espero que …………… se encuentre bien, conozco el estado traumático tras acontecimientos así. Transmítele la idea de que se le pasará y olvidará, el tiempo será su medicina.
Un saludo y gracias de corazón.
Su respuesta:
Gracias Vicente, me confortan tus palabras, pues temí haber sido cuanto menos inoportuno. Sois una familia genial. Seguro que este fin de semana todo irá muy bien, os deseo lo mejor, de corazón.
Un fuerte abrazo.
Recurriré a Chagall, a quien sino, una vez más, para ilustrar asuntos de ángeles. Tomé esta foto en Niza, con Jaime, el verano de 2007.
En esta ocasión tres ángeles visitan a Abraham, quien los recibe en su casa:
"Señor mio si ahora he hallado gracia ante tus ojos, te ruego que no pases de largo junto a tu siervo….”