martes, 22 de septiembre de 2009

Caravaggio

La mano de su madre, su reloj, Caravaggio, los principios de mi afición, esta era una de mis obras preferidas, la he admirado sin Jaime, mi maestro, él la estuvo viendo con anterioridad. He llorado su ausencia ante ella, con infinita tristeza, que me priva, entre otras muchas cosas de su talento.

2 comentarios:

benavente.serrano dijo...

Hola Vicente, el dia que hiciste este foto estaba con vosotros, en la Iglesia de San Luis de los Franceses. Los dias que pasamos juntos en Roma han dejado una huella profunda en mi.
Por el momento ne tengo tiempo de escribir mas porque tenemos un encuentro internacional en nuestra casa, pero quiero repetirte lo que ya sabes: que estais apoyados, arrpados por una red internacional de amistad y de solidaridad. A Jaime se le conoce en Méjico, en Estados Unidos, en Roma, en Mauritania, en Ruanda, en Holanda, en Polonia, en Filipinas... No estais solos! Besos,
Maria Pilar

Vicente Dobato dijo...

Hola Maria Pilar; efectivamente estabas con nosotros, todavía no había llegado Ana. Inolvidables, inefables, no tengo palabras para calificarlos, fueron días con un antes y un después, se han operado cambios en mi que perdurarán a lo largo de mi existencia. Es de gran ayuda pensar en esa gran red mundial que de algún modo tienen presente a Jaime. Un beso.